Sí, lo admito! Soy un fan del Flammkuchen!
Esta tarta alsaciana fínisima, elaborada con masa de pan, cubierta de crema fresca, bacon y cebollas. Estos dos últimos ingredientes al menos no deben faltar en el Flammkuchen tradicional. La creatividad no tiene límites en el momento de elegir los ingredientes del Flammkuchen, así que puedes añadir queso, olivas, salmón ahumado....o lo que quieras. Todo está permitido, hasta incluso un Flammkuchen en su versión más dulce con manzana, toque de canela y todo flambeado con calvados. PERO, esto sí, el Flammkuchen siempre debe ser crujiente con un sabor ligeramente ácido y, por supuesto, caliente del horno de leña al plato.
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Flammkuchen con salmón ahumado |
En cuanto al origen de esta tarta existen historias variadas. La que especialmente me gusta es la de la granjera de un pequeño pueblo alsaciano. Para comprobar si la temperatura de su horno de leña había alcanzado la temperatura adecueda para hornear el pan, cogió un trozo de la masa, la estiró hasta obtener una fina capa y la cubrió con los ingredientes más simples de aquel entonces: crema agria, bacon y cebollas. Si el tiempo de cocción de esta tarta era de 2 a 3 mínutos, entonces ella sabía que la temperatura del horno estaba adecuada para hornear el pan. Tampoco se sabe de donde viene el nombre Flammkuchen, "tarta flambeada".
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Flammkuchen |
Algunos dicen que viene de las llamas del horno de leña y otros afirman que es por que los trozos de cebolla ligeramente dorados tenían la forma de llama.
Todas estas son leyendas y seguramente nunca sabremos la verdad. Pero, lo que sí que sé seguro es que el momento de comer un Flammkuchen crujiente, finito y recien horneado es un momento muy especial y por un instante te sentirás como si estuvieras de vacaciones en aquel pueblicito alsaciano.
Siempre me he preguntado por qué no existe ningún restaurante en Barcelona donde se puede comer Flammkuchen. Incluso he buscado por recetas para hacer este tipo de tarta en casa. La verdad es que no me ha salido mal, pero claro, mi horno de casa no es precisamente un horno de leña con lo que los resultados se han limitado a ser aceptables, teniendo en cuenta las circunstancias adversas....Mi alegría por lo tanto no habría podido ser mayor al enterarme que en la Fábrica Moritz de Barcelona sirven -entre otros platos- Flammkuchen.
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Sala Fábrica Moritz Barcelona |
Realmente es el sitio idóneo para introducir en la gastronomía barcelonesa este plato tan exquisito, puesto que el fundador de la fábrica de cerveza, Louis Moritz Trautmann, que en 1851 con 20 años vino a Barcelona, nació en un pueblo alsaciano.
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Bar Fábrica Moritz Barcelona
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Os invito a probar esta tarta alsaciana que con un buen vino blanco, afrutado y bien frío aún sabe mejor. Pero de eso ya hablaremos en otro post.